Por qué Brasil es el país más afectado por los ataques terroristas en Mar Rojo

A la par de la guerra de Israel contra Hamas en Gaza, de los ataques aéreos contra los jefes de Hezbollah en el Líbano y de los cohetes de la milicia chiita que siguen impactando en territorio civil y militar israelí, existe otra guerra en el Mar Rojo que tiene un enorme impacto en el comercio mundial.

Son las ataques de los grupos terroristas de los insurgentes huties de Yemen, respaldados por Irán, que volvieron a la carga tras la guerra de Israel en Gaza.

Si tras el ataque terrorista de Hamas al territorio israelí del 7 de octubre pasado -el grupo fundamentalista asesinó a 1.200 civiles y se llevó a 240 como rehenes- los hutíes incrementaron sus blancos contra los objetivos hebreos, hoy atentan contra toda la industria naviera internacional en una zona que concentra entre el 12% y el 15% del comercio mundial. Pasan unos 19.000 cargueros por año.

Para Sudamerica la escalada tiene una importancia inmensa porque hay un país que se ve fuertemente impactado por una ola que ya registra 50 hechos violentos, según reporta el experto en Oriente Medio Luca Nevola en el llamado Proyecto de Datos de Ubicación y Eventos de Conflictos Armados (ACLED) que hace una recopilación de datos desglosado, análisis y mapeo de crisis.

Brasil, el mayor exportador de la región y sus exportación llegaron a niveles récord en 2023, coinciden analistas consultados.

Los ataques llevaron a los Estados Unidos a formar una alianza internacional de una decena de países para proteger el comercio y el paso por la zona ya que las primeras consecuencias se vieron en una baja del transporte de mercancías, de un 46% según los registros de las últimas horas del sitio PortWatch y una suba de los precios por el traslado de containers de hasta 170 por ciento: de 3.640 euros por contenedor pasaron a 4.000 dólares y para para las cargas de Asia al Mediterráneo, el precio sube a 5.175 euros, y algunas empresas están cobrando hasta 6.000 dólares.

Por los ataques estos tienen que tomar rutas más largas y mas costosas, bordear Africa, hasta la altura de Sudáfrica, para evitar la amenaza huti.

Este miércoles, luego de otro intento de ataque repelido por Estados Unidos y el Reino Unido, la naviera danesa Maersk, una de las más importantes del mundo, reclamó reanudar las operaciones por el Mar Rojo y del canal de Suez «lo antes posible» ante los altos costos para redirigir sus cargueros hacia el Cabo de Buena Esperanza, dijo el Gobierno egipcio.

Aunque a menor escala de las grandes navieras de Europa y Estados Unidos, para Brasil las consecuencias de la escalada bélica y terrorista actual son también un daño mayor si se tiene en cuenta la tendencia exportadora récord de 2023.

Al menos el 9% de toda la carga brasileña de contenedores pasa por ahí. “Para Brasil, la principal ruta afectada son los viajes hacia Medio Oriente y Extremo Oriente explicaban los expertos en Datamar.

Basta ver las preocupaciones de Brasil cuando en 2021 uno de los porta contenedores más grandes del mundo, el Ever Given, se quedó atascado en el canal de Suez durante seis días y con ello se paralizó el transporte marítimo mundial a un costo 10.000 millones de dólares al día.

Ello afectó directamente a los contenedores refrigerados brasileños -que transportan carne, frutas, productos farmacéuticos, y otros-.

En ese sector el 21% de la carga brasileña pasa por Suez, con gran foco en la exportación. Es tan estrecha la relación que ya existe una terminal de puertos de Dubai en el puerto de Santos, que forma parte de la inversión árabe en Brasil.